Algún día Te vi un punto y flotando ante mis ojos la imagen de tus ojos se quedó como la mancha oscura orlada en fuego que flota y ciega si se mira al sol.
Ceguera
Estoy por ti, hasta el culo. Y pienso estarlo tanto como pueda, el resto de tiempo que nos dejen. A partir de hoy soy ciego y sordo para cualquier boca u ojos que no sean los tuyos, evadido con sólo imaginarte puedo ser más feliz que cualquiera.
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