Algún día Te vi un punto y flotando ante mis ojos la imagen de tus ojos se quedó como la mancha oscura orlada en fuego que flota y ciega si se mira al sol.
Males necesarios
Alguien en algún momento, alguna vez me dijo que me gusta manipular a las personas, aunque no me desagradó la idea pero honestamente me pareció que no tenía verdad su afirmación pues. No lo hago, siempre término sacando mi corazón de pollo para arreglar ciertas situaciones y un poco de moral para justificar mis acciones. Cínico si, a veces, un poco. Si acepto que en los últimos tiempos he asustado a una persona diciéndole que no era sano para ella que fuéramos ni amigos, pero insistía en que me iba a “rescatar”. La recibí en mi casa una noche.. con todas las luces apagadas, asegurándole que yo siempre vivía así porque no necesitaba la luz para vivir ( jaja lo siento ); caminé sorteando magistralmente los muebles y aguantándome para no cagarme de la risa escuchando como se tropezaba mientras caminaba detrás de mí.
En medio del peo de la oscuridad veía sus ojos abiertos muy grandes, intentando ver todo. Al final si me sentí un poco mal, pero esos diez minutos fueron la primera y última vez que estuvo de visita, por supuesto todos esos discursos acerca de “yo quiero cuidarte” se fueron al coño y volvió con su novio, seguramente pensando que yo estoy loco.
En cambio, pienso en la gente que está aquí conmigo y que quiero tanto, a pesar de saber tantas cosas acerca de lo que me ha pasado, me acompañan, me apoyan y terminan comportándose conmigo como siempre, sentados en el patio de mi casa hablando y viendome tocar, llendo a comprar cigarros en la misma panaderia de siempre y desayunando en el mismo lugar..
Incluso una de esas personas me juro hoy, que tengo buen corazón.
A veces no me lo creo
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